jueves, 23 de agosto de 2018

NIÑO DEL REMEDIO

Santo Niño del Remedio, 
dulce emblema de ternura,
encanto del alma mía,
mi amor, mi bien, mi ventura.

Remedia todos mis males,
atiende mis peticiones,
consuela todas mi penas
y escucha mis oraciones.

En tanto que, reverente,
Niño Divino y Glorioso,
te digo con alma y vida:
Bendito Niño hermoso.

Santo Niño






Oh Divino y milagrosísimo Santo Niño del Remedio, 
dulcísimo Rey de los Cielos y de la tierra,
que a nosotros llegaste lleno de Amor y Redención
para ser el descanso de nuestras penas 
y la fuerza y el empuje de nuestras vidas, 
yo ....... en Ti confío, en Ti me refugio, en Ti espero.
Niño Jesús bendito, quiero que te quedes conmigo, si Tú estás a mi lado saldré triunfante en todas las pruebas, si Tú te aposentas en mi corazón
y me otorgas tu infinita bondad y misericordia,  
estoy seguro que mis problemas tendrán alivio y remedio.
Niñito bien amado que nada nos niegas 
y estas pendiente de nuestras necesidades 
cuídame de todo mal y protégeme en todo momento, tiende tus tiernas y amorosas manitas hacia mi y ayúdame a remediar todo lo que entristece mi vida.
Envíame tus bendiciones mi queridísimo y adorado Niño:en las horas duras y amargas, 
en los momentos de angustia y dificultad, 
bendíceme sin cesar Divino Niño; 
cuando veas que no puedo salir solo-a de mis problemas que pierdo las fuerzas y no se como avanzar,  bendíceme sin cesar mi amado Niño, 
envía cuanto antes tus favores  y dirige mis pasos por las sendas mas propicias.
Dulcísimo Jesús de los Remedios, 
Santo Niño prodigioso lleno de poder
que obras incomparables maravillas en nuestro beneficio,  me acerco a Ti para pedir uno de tus milagros,deposito en tus manos mi sufrimiento y necesidad y te pido con humildad el remedio que tanto preciso, Tu que eres todo amor, eres misericordioso y bueno,  concédeme que en breve vea resuelto mi grave problema:  
(pedir con gran fe el milagro que se desea conseguir).
Santo y lindo Niñito Jesús, 
Tu que haces tantos milagros en nuestro favor, 
demuéstrame una vez más que me amas  
y llena mi vida de tranquilidad, de alegría,
de amor correspondido, de armonía familiar,
de trabajo, salud, suerte y prosperidad,  
te ruego alivies las cargas que tanto me oprimen  
y concédeme lo que con inmensa fe y esperanza  
te he pedido durante estos días con esta oración.



Santísimo Niño del Remedio, Divino Infante, 

sabes que te amo con fervor y que te tengo presente, aunque a veces olvido decírtelo, 
sabes que tu protección me es necesaria siempre,  
por ello mándame a diario tu Santa Bendición,  
yo ....... no dejaré de agradecer tu auxilio  
y te tendré presente por siempre en mi mente y corazón, yo ....... quiero ser fiel devoto tuyo 
y tenerte a mi lado tanto en las penas como en las alegrías.



¡Oh Jesús Niño! mi Dios y Señor, 

oye nuestras plegarias, dirige a nosotros tus lindos ojos,ponemos nuestra fe en tu bondad, 
y por intercesión de tu Madre la Virgen Purísima 
concédenos el remedio de los males que nos aquejan. 
Niño adorado, que tu Mensaje de amor nos guíe 
en nuestras palabras y acciones
y nos haga olvidar las ofensas entre nosotros,
que tu benignísimo amparo y compañía 
nos ayude a todos a alcanzar la paz.



Amén.


Rezar 13 Padrenuestros, Avemaría y Gloria. 
Hacer la oración y los rezos tres días seguidos,
o trece si la petición es muy, muy difícil, imposible. 



El Santo Niño de los Remedios es muy efectivo y milagroso,

y, aunque se puede hacer la oración en cualquier día, 
según la antigua tradición el mejor día es el 13 de cada mes,
miles de fieles devotos acuden a El en estos días
para pedir sus favores, demostrarle su afecto 
y darle su agradecimiento por los milagros concedidos.

OH DIVINO NIÑO

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.



Oh Divino y milagrosísimo Santo Niño del Remedio, dulcísimo Rey de los Cielos y de la tierra, que a nosotros llegaste lleno de Amor y Redención para ser el descanso de nuestras penas y la fuerza y el empuje de nuestras vidas, yo … (di tu nombre) en Ti confío, en Ti me refugio y en Ti espero.

Niño Jesús bendito, quiero que te quedes conmigo, si Tú estás a mi lado saldré triunfante en todas las pruebas, si Tú te aposentas en mi corazón y me otorgas tu infinita bondad y misericordia, estoy seguro que mis problemas tendrán alivio y remedio.

Niñito bien amado que nada nos niegas y estás pendiente de nuestras necesidades, cuídame de todo mal y protégeme en todo momento, tiende tus tiernas y amorosas manitas hacia mí y ayúdame a remediar todo lo que entristece mi vida.

Envíame tus bendiciones mi queridísimo y adorado Niño: en las horas duras y amargas, en los momentos de angustia y dificultad, bendíceme sin cesar Divino Niño; cuando veas que no puedo salir  de mis problemas, que pierdo las fuerzas y no sé cómo avanzar, bendíceme sin cesar mi amado Niño, envía cuanto antes tus favores y dirige mis pasos por las sendas más propicias.

Dulcísimo Jesús de los Remedios, Santo Niño prodigioso lleno de poder que obras incomparables maravillas en nuestro beneficio, me acerco a Ti para pedir uno de tus milagros, deposito en tus manos mi sufrimiento y necesidad y te pido con humildad el remedio que tanto preciso, Tú que eres todo amor, eres misericordioso y bueno, concédeme que muy pronto vea resuelto mi grave problema:



(Pide con gran fe el milagro que deseas conseguir).

Santo y lindo Niñito Jesús, Tú que haces tantos milagros en nuestro favor, demuéstrame una vez más que me amas y llena mi vida de tranquilidad, de alegría, de amor correspondido, de armonía familiar, de trabajo, de salud, suerte y prosperidad. Te ruego alivies las cargas que tanto me oprimen y concédeme lo que con inmensa fe y esperanza te he pedido durante estos días con esta oración.

Santísimo Niño del Remedio, Divino Infante, sabes que te amo con fervor y que te tengo presente, aunque a veces olvido decírtelo, sabes que tu protección me es necesaria siempre, por ello mándame a diario tu Santa Bendición, yo… (di tu nombre) no dejaré de agradecer tu auxilio y te tendré presente por siempre en mi mente y corazón, yo … (di tu nombre) quiero ser fiel devoto tuyo y tenerte a mi lado tanto en las penas como en las alegrías.

¡Oh Jesús Niño! mi Dios y Señor, oye nuestras plegarias, dirige a nosotros tus lindos ojos, ponemos nuestra fe en tu bondad, y por intercesión de tu Madre la Virgen Purísima María, concédenos el remedio de los males que nos aquejan.

Niño adorado, que tu Mensaje de amor nos guíe en nuestras palabras y acciones y nos haga olvidar las ofensas entre nosotros, que tu benignísimo amparo y compañía nos ayude a todos a alcanzar la paz.

Amén. +

Ahora haz cinco Padrenuestros, tres Avemarías y tres Glorias.





En acción de gracias rezar el 13 de cada mes

  Bendita sea la hora y el momento en el que nació el Hijo de Dios de la Santísima Virgen María   Bendita sea la hora y el momento en el que...